Si deseas grandeza para ti y para tu ministerio, entonces debes trabajar diligentemente en tener relaciones sanas y crecientes.  Si deseas ser un gran líder, entonces debes tomar en serio tus relaciones con los demás. ¡Se trata de personas!

- Habla amablemente con la gente.

- Sonríe a la gente.

- Llame a las personas por nombre.

- Sé amable y servicial.

- Sé verdadero y auténtico.

- Muestra interés por las personas.

- Sé generoso con los elogios.

- Se considerado con los sentimientos de los demás.

- Se considerado con las opiniones de los demás.

- ¡Estar dispuesto a ayudar a otros alcanzar la cima!

Si sabes encontrar lo mejor de los demás, lo mejor saldrá de ti.

Eclesiastés 3:12 (NVI)

Yo sé que nada hay mejor para el hombre que alegrarse y hacer el bien mientras viva.

Aquí está el punto: ¡siempre ayuda a otros a tener éxito!